La tendencia a un mundo cada vez más global hace de la traducción una herramienta indispensable para la evolución de nuestra sociedad y la comunicación entre personas, empresas y organismos. Ya no sólo se traduce la documentación jurídica o técnica, sino también todo tipo de información empresarial, cultural y social.
Existen varios tipos de traducciones que podemos englobar en dos grandes áreas independientes al tipo de texto o la combinación de idiomas, a saber:
Traducción jurada u oficial: aquella traducción realizada por un traductor oficial reconocido por el Ministerio de Asuntos Exteriores en la que da fe de que su trabajo es obra fiel y completa del original.
Traducción simple: todos aquellos trabajos que no requieren certificación oficial.
El objeto de ambos trabajos puede ser desde un contrato, hasta un manual técnico, pasando por normativas, informes, etc.
Es importante remarcar que, en función de las indicaciones del cliente, una traducción puede abordarse de diferentes formas. Por ejemplo, hay ciertos documentos en los que es necesario ceñirse todo lo posible al texto, lo que es lo mismo requiere de una traducción literal; por el contrario, para otros es preciso realizar una traducción más libre que mantenga el contenido intacto no así el continente. De todas formas, en medio de esos dos métodos de traducción hay un amplio abanico de grises en los que a forma de afrontar el documento se refiere.
Al igual que en la traducción, la interpretación también puede ser jurada o simple. Dentro de esta división básica, hay diferentes tipos de servicios de interpretación (consecutiva, simultánea, de enlace, telefónica...) pero en lugar de explicar de qué trata cada uno de ellos y avasallarle con información que no necesita, preferimos que usted nos cuente cual es su necesidad y nosotros dar respuesta con el mejor y más adecuado profesional para cada caso.
En nuestro afán por dar respuesta a todas las necesidades lingüísticas de nuestros clientes, hemos desarrollado una red de profesores de idiomas como lengua extranjera que ayudan a profesionales de diferentes empresas a afrontar con mayor seguridad las inevitables comunicaciones con el exterior.
Las clases se adaptan a cada alumno o grupo de alumnos, pudiendo ser desde meramente conversacionales, teóricas, telefónicas,...además de estar enfocadas fundamentalmente al área (finanzas, marketing, derecho,...) que el cliente considera más importante desarrollar.